lunes, 29 de noviembre de 2010

Infama.


¿Qué queréis? ¿Queréis que sea igual? ¿Queréis que sea como vosotros? ¿Es eso?


Lo he pensado muchas veces, he estado al borde de la mediocridad tantísimas veces que ya perdí la cuenta, pero aun así...aquí estoy, sigo siendo yo la que escribe, sigo siendo yo la que se siente una extraña entre quienes no entienden que me estoy consumiendo, que me estoy PUDRIENDO en un sitio que me impide seguir creciendo, y no en tamaño sino como persona, que es lo único que deseo en estos momentos.


Me falta, me falta madurar si, pero no es ese tipo de madurez que todos esperáis no, no es esa precisamente. Quiero madurar de forma que al fin dejen de afectarme retrasados que te ofrecen pastillas a cambio de que subas a su coche, de imbéciles que se ríen cuando alguien de su edad cae en un charco, y en vez de dar un paso, ayudarlo a levantarse y de ofrecerle su abrigo se limitan a reírse, no sólo de él si no de ti por ser la única que no ríe. Necesito aprender a vivir, pero ¿acaso es tan fácil frente a una violencia glacial, frente a una tarde gris tras otra? .


No sé si le doy demasiada importancia a las cosas...o simplemente les doy la importancia que merecen.


Decidme, ¿qué queréis? porque si lo que queréis es verme siendo una más podéis moriros esperando, porque jamás me veréis así. Oh no...eso nunca.


sábado, 27 de noviembre de 2010

Hoy vuelvo a decaer.

No hay más que mirar, no soy la misma aunque tampoco tan distinta.

Dicen que no creo en el amor, yo digo que tengo 15 años y a estas alturas ya no creo prácticamente en nada.

Estoy empezando a pensar que quizá es mejor dejar que los niños se eduquen solos. Quizá así el golpe que se darán al averiguar que en realidad están solos, el golpe que se van a dar cuando averigüen en que mundo viven....será menor que el que se darán con unos 30 años y todas sus ideas de vida perfecta se esfumen de un zarpazo.

Abrid los ojos y empezad a construir una vida real, no implantéis sueños, implantad metas…vais a tener que empezar a ser realistas, y creedme es mejor poco a poco que de un golpe tan brusco que todas vuestras ilusiones se plasmen en un muro. Sois personas no robots que se limitan a aguantar lo que venga en un estado de stand by.

sábado, 20 de noviembre de 2010



A veces, confías plenamente en alguien, te han jugado muchísimas malas pasadas, pero tú confías.


A medida que pasa el tiempo, según le hagas falta o no te seguirán utilizando; te das la vuelta y cuando te vuelves a girar te encuentras con un panorama totalmente distinto y desolador. Entonces es, cuando te percatas por enésima vez de que te han vuelto a utilizar…de nuevo.

En ocasiones sueles detectar resquicios de afecto, pero al ser tan inusuales te muestras desconfiada y además te culpan por ello.

Causas y consecuencias.

Muchas veces, podemos llegar a ser tan terriblemente egocéntricos que creemos que los demás ni sienten ni padecen. Hablamos y hablamos cuando la mitad de las veces ni tenemos consciencia de las consecuencias que puede traer el simple hecho de abrir la boca.

Me sentí como la heroína de una novela que estaba escribiendo ella misma; la mujer que aseguraba que era demasiado fuerte para el amor aunque el narrador no dejaba de describir el deseo que la embargaba.