viernes, 10 de diciembre de 2010

Otra dosis de desgarrador realismo.

Neutro.

Ese es el adjetivo con el que podría denominar mi situación. No siento, no padezco, no escucho, ni siquiera recuerdo como solía mirar antes. A veces río, pero me arrepiento enseguida, no estoy cómoda riendo, creo que me hace vulnerable.

Lo poco que siento es una especie de pinchazo, no sé decir si es en el estomago o en el pecho...pero seguro que sabes a que me refiero. Esa sensación de que por fin encuentras un remanso de paz (o eso piensas) y estas "tranquila" (si es que se puede llamar así) pero de pronto lo recuerdas, y notas de nuevo el pinchazo. No sé decir si es un dolor físico, sólo puedo afirmar y de hecho con certeza, que es muy molesto y en ocasiones hace que me retuerza levemente y tenga que adoptar otra postura, preferiblemente una en la que mi rostro no sea visible.

Necesito algo que le de sentido a todo esto, porque últimamente no se lo encuentro a nada.

Tras mucho pensarlo, he llegado a la conclusión de que soy un monstruo.

Necesito urgentemente un respiro, un descanso lejos de todo, de estos en los que te encierras en tu habitación y lo más fructífero que haces es mirar el techo en estado, como no….neutro. Pero, ¿a caso tengo tiempo de algo, ni por asomo parecido?, creo que este descanso, merecido o no, ya está cerca, concretamente en cuanto pasen uno o quizá dos días.


En el “descanso” podría ser que sucedieran dos cosas, o bien me sirviera para salir de esta (no sé como definirlo) cosa, o bien que me sumergiera aun más en este pozo sin fondo que me está llevando a un completo desorden (emocional creo).


Por si no ha quedado claro no, no estoy loca.


No hay comentarios:

Publicar un comentario